martes, 10 de diciembre de 2013

Tipografía, arte y videojuegos.

Es muy cómodo mirar al mundo de los videojuegos y ver un entretenimiento vacío, violento y bastante superficial. Como casi todos los pensamientos cómodos, es una idiotez fácil de desmentir.

Hoy vemos un juego mitad poema, mitad documental. Type Rider.




Type Rider es un experimento patrocinado por Arte que mete al jugador en la historia de la palabra impresa. A nivel jugable es un juego de motos de trial de los de toda la vida: manejas un símbolo de dos puntos, que actúan como las ruedas de un coche. Hay una pista, hay obstáculos, y tienes que intentar llegar al extremo derecho de cada fase sin caer al vacío.

La mecánica es extremadamente simple, la gracia está en el contexto. El juego es una golosina para los ojos y los oídos, y te pasea, nivel a nivel, por la evolución de la tipografía. El primer mundo, la Gótica, suena a canto gregoriano y está hecha sobre pergamino. Siglos más tarde, a bordo de la Futura, recorres cuadros abstractos a ritmo de jazz.






El diseño es condenadamente bueno, no sólo a nivel estético. Los puzzles son variados y fáciles de entender (no siempre de resolver), las metas se explican sin palabras. No hay vidas ni límite de tiempo, así que invita a experimentar y explorar los escenarios.

Type Rider me gustó en el tráiler, pero me ha enamorado al jugarlo. Es una muy buena muestra de lo que pueden hacer los videojuegos más allá de matar marcianos. Recomendado 100%




¿Conoces algún juego más que se distinga del resto? ¡Hasta la próxima entrada!

domingo, 1 de diciembre de 2013

Publicidad y libros pop-up

Ya está visto lo bien que quedan los libros pop-up cuando los grabas en vídeos musicales, pero los videoclips no son el uso más frecuente de estas piezas. Como casi todo lo que es bonito y sorprendente, los libros móviles se emplean a menudo para venderte cosas. Hoy vamos a ver pop-ups y publicidad.





Como casi todos se usan en cuentos infantiles, la idea más fácil es usar libros desplegables para asociar productos a los niños y sus familias, como en este de Persil.






Luego, llevártelo a la narrativa para vender historias, de uno u otro tipo, como hace aquí Mastercard.






O usarlos como ejemplo de cosas bonitas que caben en una mano, o en un bolsillo, como Samsung (aunque para llevar un monstruo de estos necesitas una mano de abofetear esfinges).




BOLA EXTRA: Estas tarjetas usan el método de arquitectura origámica que sale en la última entrada.



Y luego puedes hacer una animalada como los de Monodot para Pearle, en Bélgica, y meter libros pop-up gigantes, ganar un Guinness y quedar como un rey.




Los libros desplegables son sorprendentes en vivo y vistosos en vídeo. A la próxima entrada audiovisual buscaré ejemplos en el cine, que hay algunos muy chulos. ¡Nos vemos!

lunes, 18 de noviembre de 2013

Pensar, pintar, cortar y plegar.

Hay un método de diseño de pop-ups que, a pesar de tener una base técnica muy simple, permite obtener unos resultados espectaculares. Se trata de la arquitectura origámica.

Foto: arqhys


La arquitectura origámica nace del kirigami, que es el arte japonés de cortar papel con estilo, y la inventa el profesor Masashiro Chatani a principios de los 80. La gracia de la arquitectura origámica es que no necesita pegar piezas al papel ni imprimir imágenes. Funciona exclusivamente con el corte y el plegado.

Es un sistema de construcción de pop-ups muy práctico para principiantes. Vamos a ver cómo funciona.



Lo primero es hacerse una idea de lo que estás intentando construir. Lo único que debes tener en cuenta es que con este sistema los objetos siempre están pegados al suelo y a la pared en algún punto, y que todos los planos son siempre verticales u horizontales.

Cuando sabes qué quieres montar es el momento de pasarlo al papel.


El siguiente paso requiere un poco de visión espacial. Imagina cómo sería tu modelo si lo miraras de frente, a unos 45 grados del suelo. Esa proyección es la que debes pasar al plano. ¡Ojo! tus piezas tienen que tener el alto y el ancho de la pieza final, no las achates "por la perspectiva".

Tu plano final parecerá una versión estirada verticalmente del modelo que quieres hacer. Ahora toca pasarle el cutter a las líneas verticales y marcar los pliegues de las horizontales.


Si has calculado bien las medidas de tu modelo (eso es historia para otra entrada) tu modelo podrá abrirse y cerrarse 90 grados, y tendrá aproximadamente la forma del dibujo original. Verás que todos los planos verticales están siempre paralelos a la pared de atrás, y todos los planos horizontales lo están al suelo de la tarjeta.

Si el resultado no está muy allá no desesperes, puedes empezar con estas plantillas sencillas o ponerte a prueba con estos pop-ups avanzados. Por último, echa un ojo a las maravillas que hace Ingrid Siliakus.

¿Has hecho un modelo propio? ¡Quiero verlo!

lunes, 11 de noviembre de 2013

Música, vídeos y papeles cortados.

Los ibros móviles no están sólo en las librerías. Uno de los usos más habituales para los papeles cortados es grabarlos en vídeo abriéndose y cerrándose. Se emplean en cine, a veces en publicidad y a veces, como en esta entrada, en vídeos musicales.

Aquí van 3 videoclips que le sacan partido a la ingeniería del papel:

OK, de Shitdisco


Este tiene tiempo ya. Aunque al libro le asoman pestañas por todos lados el uso de los mecanismos está muy bien cogido. Y la canción mola.


Wednesday, de Tori Amos


Esto no es el videoclip oficial de la canción, sino un trabajo de estudiante con pop-ups sencillos pero muy bien resueltos. Una interpretación en papel de la letra y melodía.


Lille, de Lisa Hannigan


Por último, el de Lisa Hannigan tiene la mejor ingeniería de los tres, con un montón de volúmenes y de mecanismos bien construídos. Un gran trabajo de pop-up.

Eso es todo por hoy, si me he dejado algún videoclip por poner déjalo en los comentarios.

¡Hasta la próxima entrada!

lunes, 5 de agosto de 2013

Dulce, salado y amargo.

Esto es Albarracín:



Albarracín es un pueblo pequeño a veinte minutos de Teruel, que lleva albergando desde hace siete años el que posiblemente sea el mejor curso de ilustración y diseño gráfico que se imparte ahora mismo en España.

El curso está dirigido desde sus inicios por Isidro Ferrer y Grassa Toro, veteranos ambos en esto de contar historias con imágenes, y reúne a profesionales de renombre en el diseño gráfico, el arte y la ilustración para impartir clases durante cuatro días a los alumnos que pasen el proceso de inscripción.

He tenido la suerte de asistir a la edición de 2013, titulada Dulce, salado y amargo, y de entre los seis profesores me ha tocado compartir taller con Borja y Gerard, de Lo Siento. Son los autores, entre otras obras, de esto:



Con ellos hemos estado experimentando en diseño de packaging, hemos cortado papeles con más y menos acierto y nos lo hemos pasado bastante bien. Nuestro ejercicio ha sido representar, con el diseño de embalaje, los conceptos de dulce, salado y amargo (y el de ácido, si nos sobraba tiempo). Podíamos envolver alimentos, bienes o conceptos más peregrinos. Yo me he decantado por los perfumes.




El taller, que se ha extendido durante tres días, ha molado un mucho. Gracias sobre todo a Gerard, que como obseso del papercraft (como un servidor) nos ha dado bastantes pistas técnicas interesantes. El resto de talleres, con profesores del calibre de Ajubel o Alex Trochut, también han tenido una producción de trabajos asombrosa. 





Hay más y mejores fotos, cortesía de Rubén Vicente, en la galería oficial del curso. Yo os dejo con otro de los profesores, Henning Wagenbreth, que además de enseñar a ilustrar da conciertos:


¡Hasta la próxima entrada!

sábado, 6 de julio de 2013

Mapas al cuadrado

Hace dos meses publiqué un trabajo ya antiguo en que experimentaba con nuevas formas de plegar un mapa para que se abriese y cerrase solo. Hoy me he encontrado esto:


Los mapas de map2 le sacan un partido fantástico a esta técnica, ofreciendo un mapa urbano (hasta ahora de Londres y Berlín, pronto también de NY) sobre el que puedes hacer zoom. Todo es cuestión de plegados y cortes, y me parece una idea magnífica.

Podéis seguir la campaña en kickstarter (y, como siempre, ver mucho más origami y pop-up en Carbonara.es)

viernes, 8 de marzo de 2013

Ilusiones en tres dimensiones

He estado haciendo experimentos con ilusiones ópticas en papercraft, y ha salido este enano. Es una vuelta de tuerca sobre el maneki neko tradicional japonés, que traen buena suerte en todas las tiendas multiprecio del mundo.

Como poner un gato oriental en la mesa es un engorro, aquí os dejo un ratón.

 Una vez montado, el Maneki Mouse os dará fortuna y prosperidad desde la comodidad de vuestro escritorio, y os seguirá con la mirada allá donde vayáis, siempre que "allá donde vayáis" sea delante de él.


Esta es la plantilla para imprimir sobre A4. ¡Ojo! La cabeza dobla hacia el interior, como un embudo.


¡Buena suerte!

viernes, 1 de marzo de 2013

Mapas en origami

Últimamente me he dado cuenta de que no tengo ningún sitio donde se expongan de forma sencilla los trabajos de pop-up y tratamiento del papel que he estado haciendo todos estos años. Por ello estoy revolviendo por mis archivos poniendo un poco de orden, y preparando algo que pueda llamarse portfolio.

Rebuscando he encontrado el prototipo de un sistema que desarrollé hace algunos años, cuando trabajaba en una agencia de publicidad, para producir un mapa grande que no hiciera falta doblar y desdoblar a mano. Por la relación entre la superficie de portada y la de interior (y acordándome de Mundodisco) lo llamé 4X.

Funciona así:


El sistema es bastante sencillo, se parece muchísimo al pliegue de base que se usa en origamis como la grulla o el lirio. El esquema de plegado es este:

imprime esto sobre un A4 y pliega como en el vídeo

Curiosamente, años después mi hermano me trajo un pequeño mapa turístico del centro de Londres que usaba prácticamente el mismo plegado para conseguir este efecto. Me encantó ver que alguien más había llegado a lo que parecía la conclusión lógica de esta técnica.

Pronto algunos hallazgos más. ¡Nos vemos!